TRES RAZONES PARA HACER ARTE:
-Como tener claro el propósito y objetivo del trabajo artístico-
![]() |
Crónica de un dolor infinito Serie: Imposibilitados Abisay Puentes |
No existe formulas mágicas para trascender (puesto que detrás de eso hay otros factores), pero sí existe formas de ser notado cuando estés en vida; al menos, dentro de lo razonablemente posible elevar tu vuelo por encima de quienes te rodean. El factor más determinante no son ni las galerías, ni las exposiciones que logres hacer, ni tus maestros, ni el país donde vivas o te desarrolles como artista; aquí el factor determinante eres TU. Voy a dejarte con un pensamiento que te dará luz sobre esta idea:
"El genio se compone del dos por ciento de talento y del noventa y ocho por ciento de perseverante aplicación."
Ludwig Van Beethoven
Yo he encontrado tres razones esenciales para hacer el arte que hago:
1. Por la imagen del Creador que queda en mí:
El apego a lo estéticamente disfrutable es, un reflejo de esa perfección y belleza que hay en Dios. Tratamos de separarnos lo más posible de todo lo que nos recuerde a Dios. Lo negamos en público y en silencio lloramos la necesidad de llenar ese vacío. Y es que tenemos una necesidad incontrolable de nuestro Creador. Solo que algunos optan por reconocerlo en la plena carrera de la vida, otros ante las calamidades o la muerte y otros simplemente dejan pasar sus años sin estar acorde a la razón primaria de su existencia. Sea cual sea, necesitamos el arte o cualquier destello (por mínimo que sea) de algo con estética. No importa cuán sofisticada sea nuestra percepción y conocimiento de estética o arte, simplemente nos sentimos atraídos por él, en cualquiera de sus manifestaciones.
¿Donde encuentro mi paz? Serie: Imposibilitados Abisay Puentes |
2. Por la necesidad de comunicación con mis semejantes.
Esa necesidad, es la que nos hace vivir y convivir con otros; hablar y comunicarles pensamientos. Que sucede, que en ocasiones la aridez de la prosa, sobre todo si se está hablando de cosas fuera de nuestro interés, suele ser bastante lejana al arte. Aun que hoy se pretende calificar a cualquier acción humana como arte. Particularmente, yo no tengo por arte toda acción humana. Mucho menos si en ellas van incluido el destruir y dañar, sea: física, mental o moralmente.
La necesidad de expresarnos con estética subyace en nuestro interior. Sin importar cual sea su especialización o maestría, en algún momento nos sentimos inclinados a expresarnos con más que las simples palabras con que hablamos. Nosotros los artistas, tenemos una capacidad extra, que nos hace expresarnos de una forma en la que las sensibilidades son tocadas. Esta comunicación, un tanto más singularmente estética que la regular o común, tiende a ser exhibida en lugares especiales, precisamente por lo que posee algo fuera de lo común. Pero para el artista, a la larga, es lo mismo que hablar; solo que nosotros hablamos sobre una plataforma más perdurablemente bella (entiéndase bella por cualquiera de las excepciones que se quiera usar).
3. Por el mundo que me rodea.
![]() |
Clamor Serie: Imposibilitados Abisay Puentes |
Ahora, no soy de los que trato de reproducir fotográficamente todo lo que me rodea; sino que interpreto cada elemento de lo que entiendo debe ser particularmente resaltado de mi mundo interior. Así, me veo más cercano al concepto de creador. Saco de la nada, pero en base a lo que conozco y siento en mí. Le doy de mi pulso y esencia, siendo el filtro de lo estético mi temperamento creador.
Concluyendo: tener bien claro razones por las que haces tú arte, te ayuda a estar centrado en lo realmente importante. Aplicarte en las tareas que te sustentarán conceptual y formalmente. Y te ayudarán a maximizar tu inteligencia emocional, la más determinante de todas las inteligencias.
Comentarios
Publicar un comentario