He querido dejar este fragmento de una tentativa por explicar mi manera de hacer arte. Aquí les dejo la sección que trata con mi estilo. Estilo, no es mas que la manera en que le das forma a tu estética. Sobre la estética de mi obra postraré mas adelante.
I. Estilo de los imposibilitados:
1. La pregunta.
Todo el que ha sufrido barbaries (me explico, pueden ocurrir barbaries tanto en el plano físico, como intelectual y espiritual; que generalmente ocurren todas juntas), tiene un conocimiento tangible del dolor que se arraiga en todas las partes del alma. Cuando la maldad se hace realidad, cuando palpamos la frialdad con que se suele arrancar la razón y motivo de nuestra corta existencia, irremediablemente nuestra visión de la vida no es otra que con los ojos de la tribulación.

En mi vida, he tratado de buscar respuesta a una pregunta que se pudiera formular de varias maneras: ¿Por qué existe en el ser humano la maldad? ¿Por qué el hombre es malo? ¿Por qué muchos han de cargar el peso de la maldad de otros, y a su vez, perpetúan la degradación de su especie, dañando a sus semejantes más inmediatos con insensibilidad e indolencia? ¿Por qué, el hombre se presta a fines denigrantes y destructivos, a sumergirse en terribles bajezas, a hollar con sus pies su sangre y atropellar su era?
He hurgado en la historia; he cavado en mi conciencia; he buscado respuesta a esta pregunta de mil veces mil cabezas. Y solo he encontrado una respuesta: El ser humano esta “IMPOSIBILITADO”.
2. Existencia Imposibilitada.

La deformidad, el lánguido parecer de sus músculos, en ocasiones la hinchazón, deformidad por una maldad crónica. La dilatación de sus manos y pies, las exageración de extremidades, excesos de desproporciones que a su vez mantienen una proporción propia al carácter y esencia de sus almas. No necesariamente es el mismo personaje en todas las obras. Son diferentes estados, diferentes situaciones, mundos interiores, confusos, oscuros, penumbrosos.

3. Espíritu de la serie.
No me interesa entrar en detalles, ni en los paisajes, ni en espacios que no son parte del mensaje; solo me centro en el espíritu de la obra, en el estado que quiero que se perciba, quitar de mi mente las frívolas demostraciones de talento, que pudieran empañar la profundidad de la obra. Como artista quiero trasmitir una obra que este en armonía con el mensaje. Mi alma rechaza cualquier intento por agradar solo la retina de mi espectador; quiero que se sienta el peso de la amarga existencia, de almas incomprendidas, olvidadas, ignoradas, odiadas.
Toda obra de arte despliega una estela de sentimientos innatos al ser, que en cierta forma es parte de un sentimiento colectivo, o al menos, refleja estados de ánimos que son comunes a muchas personas. No todas las obras de arte son tocadas con la gracia de mover sensibilidades; no todos los artistas poseen el mismo grado de intuición para provocar catarsis en los espectadores. Sea como sea, creo que se puede lograr una interacción espiritual, una identificación artista-obra-espectador que se cuaja en una exhibición.

El universo de los imposibilitados es interior, por eso la sombría palidez de un paisaje intenso y melancólico. Ahora, todo escenario, todo momento tiene su espacio sonoro también.
4. Espacio sonoro de los imposibilitados.
Le he compuesto a la pintura un espacio sonoro, que es el sonido del mundo interior de los imposibilitados. Aunque la música, en comparación con la pintura se queda en un plano subjetivo, trato de que el mismo espíritu rija, para la música como para la pintura. Repito, la música puede cambiar su significado con más facilidad que la pintura pero se puede lograr una inducción definida, al establecer una relación música pintura; casi muy parecida a las bandas sonoras de el cine, solo que en este caso la pintura en tiempo es inmóvil, siempre y tanto el espectador se mantenga observando la pintura, esta queda estática; pero la música tiene tiempo limitado, puesto que está sometida al espacio tiempo.
Mi experiencia es, que la pintura se puede ver sin la música que le compuse, pero cuando se escucha el sonido de este mundo interior, es como recobrar la audición después de haber estado sordo. Creo que este es el problema de la pintura, que es sorda, pero al crearle un espacio sonoro, se puede ver y oír. Creo que la comprensión del espíritu es bastante completa. Aunque aun así, no necesariamente tiene que ser entendida tal cual es mi significado.
Es pues, la música de los imposibilitados, el lamento extendido atreves del recorrido del pincel y el sonido de una lagrima que nunca fue entendida; es también la amarga dilatación de la nada, es la perdida de las ilusiones, es la vibración de los sentimientos, sollozos, quejas interiores, pensamientos nunca enunciados, es la sonoridad de la desesperanza, es la aridez de una esperanza muerta.